RELLENO DE MATERIAL INERTE, TEZONTLE O JAL. PARA DAR PENDIENTES EN AZOTEAS, INCLUYE ELEVACION, TENDIDO Y COMPACTADO.

El relleno "peso pluma" de la construcción. El jal es el agregado ligero por excelencia en el occidente de México, ideal para dar pendientes en azoteas sin añadir peso. Descubre sus propiedades, el precio por m³, cómo se compara con el tezontle y sus múltiples aplicaciones.

En la construcción mexicana, especialmente en edificaciones con losas de concreto planas, surge un desafío fundamental: cómo evacuar el agua de lluvia de manera eficiente sin comprometer la integridad estructural del edificio. La solución tradicional implica añadir una capa de mortero para crear pendientes, pero esto introduce una "carga muerta" considerable que no todas las estructuras pueden soportar. Aquí es donde el material jal se convierte en el protagonista. Este agregado ligero, extraído principalmente del occidente del país, ofrece una solución ingeniosa y eficaz para formar rellenos aligerados. Su bajo peso reduce drásticamente las cargas sobre vigas y cimentaciones, mientras que sus propiedades aislantes aportan un valor añadido de confort térmico. Esta guía completa explora a fondo el universo del jal, analizando el jal material precio m3 para 2025, sus características técnicas, el proceso correcto de aplicación, sus diferencias con el tezontle y los errores que se deben evitar para garantizar un proyecto exitoso y duradero.

Jal vs. Tezontle: ¿Cuál es el Mejor Relleno Aligerado para Azoteas?

La elección entre los dos agregados ligeros más populares de México, el jal y el tezontle, rara vez se basa en cuál es "mejor" en un sentido absoluto. Más bien, la decisión correcta depende de la geografía, el presupuesto y las necesidades específicas del proyecto. Ambos son materiales de origen volcánico, pero sus diferencias fundamentales en formación, peso y propiedades térmicas dictan su uso óptimo.

Origen y Geografía: La Batalla de los Volcanes

El factor más determinante en la elección entre jal y tezontle es la logística. Al ser materiales de bajo costo y alto volumen, el costo del flete puede fácilmente duplicar o triplicar el precio final del producto puesto en obra.

• Jal (Piedra Pómez): Geológicamente, el jal es piedra pómez, un tipo de vidrio volcánico extremadamente poroso que se forma por el enfriamiento rápido de una lava rica en gases. Esta estructura, similar a una espuma sólida, es la que le confiere su extraordinaria ligereza. En México, los yacimientos más importantes y explotados comercialmente se encuentran en los estados de Jalisco y Nayarit, convirtiéndolo en el material de elección indiscutible en toda la región Occidente y el Bajío del país.

• Tezontle (Escoria Volcánica): El tezontle es una escoria volcánica, formada a partir de lava que, aunque también porosa, contiene menos gases atrapados y se enfría de manera diferente, resultando en una roca más densa y con una estructura vesicular más abierta. Su característico color rojo o negro se debe a su alto contenido de óxidos de hierro. Sus yacimientos son abundantes en todo el Eje Neovolcánico Transversal, especialmente en las cercanías de los volcanes del Valle de México, como el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl. Esto lo convierte en el material predominante y más económico para rellenos en el Centro de México (CDMX, Estado de México, Puebla, Hidalgo, Morelos).

Propiedades Físicas: Peso, Aislamiento y Absorción de Agua

Las diferencias en su formación geológica se traducen directamente en propiedades físicas que impactan el desempeño en una azotea.

• Peso Volumétrico (Densidad): Esta es la diferencia más crítica. El jal es significativamente más ligero. Mientras que la grava común tiene un peso volumétrico de aproximadamente 1,600 kg/m³, el tezontle seco ronda los 1,200 - 1,400 kg/m³. El jal, en cambio, tiene un peso volumétrico seco de apenas 700 a 900 kg/m³. Esto significa que, para un mismo volumen de relleno, el jal impone casi la mitad de la carga muerta que el tezontle, una ventaja crucial en remodelaciones o en zonas sísmicas.

• Aislamiento Térmico: La estructura del jal, con sus innumerables burbujas de aire atrapadas, lo convierte en un excelente aislante térmico natural. Un relleno de jal en la azotea funciona como una barrera que reduce la transferencia de calor hacia el interior de la vivienda, manteniendo los espacios más frescos en climas cálidos. El tezontle, aunque también poroso, tiene una capacidad de aislamiento moderada; ayuda a conservar el calor pero no es tan eficiente como el jal para bloquearlo.

• Absorción de Agua: Ambos materiales son porosos y absorben una cantidad considerable de agua. Sin embargo, la estructura micro-porosa del jal le confiere una capacidad de retención de agua muy alta, superior a la del tezontle. Esta característica, que podría parecer una desventaja, es en realidad la clave para entender una de las prácticas más importantes durante su instalación: la necesidad de pre-humedecerlo. Si se utiliza seco, el jal actuará como una esponja, "robando" el agua necesaria para la correcta hidratación del cemento en la mezcla, lo que resultaría en un relleno débil y quebradizo.

Costo y Disponibilidad Regional: El Factor Decisivo

Como se mencionó, el costo es un reflejo directo de la geografía. Es casi siempre más rentable utilizar el material local.

• Costo del Jal: En su zona de origen (Guadalajara y alrededores), el precio del jal puede oscilar entre $250 y $650 MXN por metro cúbico. Fuera de esta región, el costo del flete incrementa drásticamente su precio.

• Costo del Tezontle: En el Valle de México, el tezontle es la opción económica, con precios que van desde $500 hasta $1,050 MXN por metro cúbico.

A continuación, se presenta una tabla comparativa que resume las diferencias clave:

Proceso de Colocación de Relleno de Jal en Azotea

La correcta instalación de un relleno de jal es un proceso metódico que garantiza la durabilidad y funcionalidad del sistema de azotea. Omitir cualquiera de estos pasos puede llevar a problemas futuros como encharcamientos, fisuras o desprendimientos.

Limpieza y Preparación de la Losa

El primer paso, y uno de los más cruciales, es la preparación del sustrato. La superficie de la losa debe estar completamente limpia, seca y estructuralmente sana. Es imperativo barrer y raspar para eliminar polvo, grasa, partículas sueltas y, fundamentalmente, cualquier resto de impermeabilizante antiguo que esté mal adherido. La adherencia del nuevo relleno depende por completo de la solidez y limpieza de la base.

Trazo de Niveles y Pendientes ("Maestras")

El objetivo del relleno es crear una pendiente pluvial para dirigir el agua hacia las bajadas o desagües. Se debe establecer una pendiente mínima del 2% (es decir, 2 cm de desnivel por cada metro de distancia horizontal). Para materializar esta pendiente, se tensan hilos de nylon (conocidos como "reventones") desde los puntos más altos de la azotea hasta las coladeras. Debajo de estos hilos, se construyen fajas de mortero llamadas "maestras", que servirán como guías físicas para nivelar el relleno.

Humedecido del Jal y de la Losa

Este paso es fundamental debido a la alta porosidad del jal. Antes de preparar la mezcla, se debe regar abundantemente tanto la superficie de la losa como el montón de jal. El objetivo es que ambos estén saturados de humedad pero sin generar encharcamientos. Esto evita que la losa seca y el jal "roben" el agua de la mezcla de mortero, lo cual es vital para asegurar que el cemento se hidrate correctamente y alcance su resistencia diseñada.

Preparación de la Mezcla Ligera (Jal, Cemento y Arena)

La mezcla se prepara combinando el jal (previamente humedecido), arena, cemento y agua. Esto puede hacerse manualmente sobre una superficie limpia o, de manera más eficiente, con una revolvedora de concreto. La dosificación exacta se detalla en la sección correspondiente, pero el objetivo es lograr una mezcla con consistencia plástica, homogénea y trabajable, que no sea ni muy seca ni muy aguada.

Colocación y Nivelación del Relleno

La mezcla preparada se transporta a la azotea, comúnmente en carretillas o botes, y se vierte en los espacios delimitados por las maestras. Con una regla larga de aluminio o madera, se va extendiendo y enrasando el material, utilizando la parte superior de las maestras como guías. Este proceso, conocido como "regleado", asegura que la superficie del relleno adquiera la pendiente exacta definida por los hilos.

Compactación Ligera

Una vez extendido y nivelado el relleno, se debe compactar ligeramente. Esto se realiza golpeando suavemente la superficie con una llana de madera o un pisón de mano. El propósito no es densificar el material en exceso (lo que reduciría su capacidad aislante), sino asentar las partículas, eliminar grandes vacíos o bolsas de aire y garantizar una masa más homogénea y estable.

Curado del Relleno

El curado es el proceso de mantener la humedad en el mortero durante su fraguado inicial para que el cemento desarrolle su máxima resistencia. Si la mezcla se seca demasiado rápido por el sol y el viento, se vuelve débil y propensa a fisurarse. A partir de que la superficie ha endurecido lo suficiente para no deslavarse, se debe rociar con una fina niebla de agua 2 o 3 veces al día, durante un mínimo de 3 días consecutivos.

Especificaciones del Jal y Herramientas Necesarias

Para garantizar un trabajo de calidad, es fundamental conocer las características del material que se está utilizando y contar con el equipo adecuado.

A continuación, se presenta una tabla con las especificaciones técnicas más relevantes del jal para su uso en rellenos de azotea.

Para la correcta ejecución de los trabajos, se requiere un conjunto de herramientas básicas de albañilería:

• Pala y Carretilla: Para el manejo y transporte de los materiales (jal, arena, cemento) y de la mezcla.

• Revolvedora de concreto: Aunque no es estrictamente indispensable para trabajos pequeños, su uso es altamente recomendable para garantizar una mezcla homogénea y agilizar el proceso.

• Botes de 19 litros: Esenciales para medir los volúmenes de los materiales y asegurar una dosificación constante.

• Manguera de nivel y Nivel de mano: Para el trazo preciso de las pendientes.

• Regla de aluminio: Herramienta clave para enrasar y nivelar el relleno utilizando las maestras como guía.

• Llana o Flota de madera: Para la compactación ligera y el acabado inicial de la superficie.

• Cuchara de albañil: Para colocar y rematar la mezcla en áreas de difícil acceso.

Cantidades y Dosificación para 1 m³ de Mezcla Ligera con Jal

Preparar la mezcla correcta es fundamental para el éxito del relleno. La siguiente "receta" es una dosificación típica y probada en la construcción mexicana para preparar 1 metro cúbico (m3) de relleno ligero no estructural. Es importante destacar que esta mezcla está diseñada para ser ligera y llenar espacios; no posee resistencia estructural y no debe utilizarse para elementos como losas, trabes o castillos.

La medición por "botes" de 19 litros es una práctica común y efectiva en obra para mantener la proporción.

Análisis de Precio Unitario (APU) - Ejemplo Detallado

Para comprender el costo real de un relleno de azotea, no basta con conocer el precio del material. El Análisis de Precio Unitario (APU) desglosa todos los costos involucrados en la ejecución de un metro cúbico de trabajo, incluyendo materiales, mano de obra y equipo.

A continuación, se presenta un ejemplo numérico hipotético pero realista, basado en una estimación de costos para 2025 en la región Occidente de México, donde el jal es local y económico.

Advertencia: Este es un ejemplo ilustrativo. Los costos reales varían significativamente según la región, el proveedor, el volumen de compra y las condiciones específicas de la obra. Se recomienda siempre solicitar cotizaciones locales.

Este análisis muestra que el costo total del trabajo instalado por metro cúbico es considerablemente mayor que el simple costo del material, un factor crucial para una presupuestación precisa.

Normativa, Permisos y Seguridad: Construye con Confianza

Realizar trabajos de construcción, incluso si se trata de una remodelación en azotea, implica cumplir con normativas de calidad, obtener los permisos correspondientes y, sobre todo, garantizar la seguridad de los trabajadores.

Normas Mexicanas (NMX) Aplicables

Para asegurar la calidad y el desempeño adecuado de los materiales utilizados en el relleno, existen Normas Mexicanas (NMX) de cumplimiento voluntario que sirven como referencia de calidad en la industria. Las más relevantes para este trabajo son:

• NMX-C-111-ONNCCE: Esta norma se refiere a los "Agregados para Concreto Hidráulico". Establece las especificaciones que deben cumplir materiales como el jal y la arena, incluyendo límites de granulometría, limpieza (control de sustancias nocivas como arcilla o materia orgánica) y propiedades físicas para garantizar su idoneidad en mezclas de concreto y mortero.

• NMX-C-414-ONNCCE: Esta norma aplica a los "Cementantes Hidráulicos". Clasifica los diferentes tipos de cemento que se comercializan en México (como el CPO o CPC) y define sus especificaciones de desempeño, como tiempos de fraguado y resistencia a la compresión, asegurando que el aglutinante de la mezcla sea de calidad controlada.

Permisos de Construcción

La necesidad de un permiso de construcción depende de la naturaleza del proyecto:

• Obra Nueva: La colocación del relleno de azotea es una partida más dentro del proyecto constructivo general. Por lo tanto, está amparada por la Licencia de Construcción Mayor que se tramita para la totalidad del edificio.

• Remodelación: Aquí la situación varía. Si se trata de una reparación menor, es posible que no se requiera permiso. Sin embargo, añadir una capa de relleno, aunque sea ligero, implica un aumento en las cargas muertas de la estructura. Para modificaciones que superan ciertos metros cuadrados o que pueden afectar la estabilidad estructural, es obligatorio tramitar un permiso de construcción para remodelación o ampliación. En muchos municipios de México, esto requerirá la firma y supervisión de un Director Responsable de Obra (DRO), quien debe evaluar y certificar que la estructura existente puede soportar el peso adicional sin riesgo.

Seguridad y Equipo de Protección Personal (EPP)

La seguridad en la obra es innegociable. El trabajo en azoteas y la manipulación de cemento presentan riesgos específicos que deben mitigarse con el uso obligatorio de Equipo de Protección Personal (EPP) por parte de toda la cuadrilla :

• Casco de seguridad: Protege contra la caída de objetos o golpes en la cabeza.

• Botas de seguridad con casquillo: Indispensables para proteger los pies de impactos, aplastamientos y perforaciones.

• Guantes de carnaza o nitrilo: Protegen las manos de la abrasión de los materiales y de las quemaduras químicas que puede provocar el cemento.

• Gafas de seguridad: Esenciales para evitar que el polvo, partículas de jal o salpicaduras de la mezcla entren en los ojos.

• Mascarilla contra polvo (cubrebocas): Protege el sistema respiratorio de la inhalación de polvo de cemento y sílice, partículas nocivas a largo plazo.

Costos Promedio del Material Jal por Región en México (Estimación 2025)

El precio del jal es extremadamente sensible a la geografía. Al ser un material de bajo costo por volumen, el transporte (flete) desde sus bancos de origen en Jalisco representa el componente más significativo del precio final en otras regiones del país.

Nota importante: Los siguientes precios son una estimación o proyección para 2025, basados en datos de mercado de finales de 2024. Son costos aproximados del material puesto en un punto de venta local y no incluyen la entrega final a la obra. Están sujetos a inflación, tipo de cambio y variaciones por distribuidor y volumen de compra.

Principales Aplicaciones del Material Jal

La ligereza y porosidad del jal lo convierten en un material versátil con múltiples aplicaciones en la industria de la construcción y más allá. Aunque su uso más conocido es en azoteas, sus beneficios se extienden a otros sistemas constructivos y sectores.

Como Relleno Aligerado para dar Pendientes en Azoteas

Esta es su aplicación principal y más extendida, especialmente en el occidente de México. Se utiliza para crear el volumen necesario que permita formar las pendientes pluviales en losas de concreto planas, garantizando el correcto desalojo del agua sin añadir una carga muerta excesiva a la estructura del edificio.

En la Fabricación de Blocks y Bovedillas Ligeras

El jal es un agregado ideal para la producción de elementos de mampostería ligera. Al sustituir la grava y parte de la arena en la mezcla, se fabrican blocks de concreto y bovedillas para sistemas de losa nervada que son significativamente menos pesados que sus contrapartes tradicionales. Estos elementos no solo reducen el peso total de la edificación, sino que también mejoran considerablemente el aislamiento térmico y acústico de los muros y techos.

Como Sustrato Drenante en Jardinería y Azoteas Verdes

La alta porosidad del jal lo hace excelente para aplicaciones hortícolas. Mezclado con tierra o sustratos, mejora la aireación y el drenaje, evitando que las raíces de las plantas se encharquen. Es un componente fundamental en la capa de drenaje de los sistemas de azotea verde, donde su ligereza es una doble ventaja, facilitando la evacuación del exceso de agua sin sobrecargar la losa.

Como Agregado para Concretos Ligeros No Estructurales

El jal es el componente clave en la elaboración de concretos ligeros, a menudo comercializados bajo nombres como "Jalcreto". Estos concretos no tienen la resistencia para ser usados en elementos estructurales como columnas o trabes, pero son perfectos para firmes de concreto, plantillas de cimentación, rellenos de nivelación en entrepisos y la fabricación de elementos prefabricados decorativos o de bajo compromiso estructural.

Errores Frecuentes al Usar Jal para Rellenos y Cómo Evitarlos

Aunque el uso de jal es relativamente sencillo, existen errores comunes en su aplicación que pueden comprometer la calidad y durabilidad del sistema de azotea. Conocerlos es el primer paso para evitarlos.

• Problema: Falta de Cemento en la Mezcla (Relleno Disgregable)

  • Descripción: Por intentar "ahorrar" cemento o por una dosificación inconsistente (medir "a paladas"), la mezcla queda demasiado "pobre". El resultado es un relleno que, una vez seco, no tiene cohesión, se desmorona al tacto y no conforma una base sólida para el entortado posterior.

  • Solución: Respetar la dosificación recomendada (mínimo 2.5 bultos por m³). Utilizar siempre un método de medición volumétrico consistente, como botes de 19 litros, para asegurar que la proporción sea la misma en cada mezcla.

• Problema: Pendiente Insuficiente (Encharcamientos)

  • Descripción: Un error en el trazo de niveles o un regleado descuidado resulta en una pendiente inferior al 2% o, peor aún, en contrapendientes. Esto provoca que el agua se estanque en lugar de fluir hacia los desagües, creando una presión hidrostática constante sobre el impermeabilizante, acelerando su desgaste y generando filtraciones.

  • Solución: Verificar dos y tres veces el trazo de niveles con una manguera de nivel o un nivel láser antes de verter la mezcla. Una vez curado el relleno, realizar una "prueba de inundación" (verter agua sobre la superficie) para identificar visualmente cualquier zona de estancamiento y corregirla antes de impermeabilizar.

• Problema: Mala Compactación (Hundimientos Futuros)

  • Descripción: Si la mezcla solo se vierte y se nivela sin ningún tipo de asentamiento, pueden quedar grandes vacíos internos. Con el tiempo, el peso del entortado, el tráfico peatonal y las vibraciones pueden hacer que el relleno se asiente de forma irregular, provocando fisuras o hundimientos en el firme de acabado.

  • Solución: Realizar una compactación ligera y sistemática con una flota de madera o un pisón de mano. Esto no busca densificar el material, sino asegurar que las partículas se acomoden y eliminen las bolsas de aire más grandes.

• Problema: No Humedecer el Jal Antes de Mezclarlo (Mezcla Débil)

  • Descripción: Este es quizás el error técnico más crítico y común. El jal seco es extremadamente absorbente. Si se introduce en la revolvedora sin estar previamente saturado, "robará" una gran parte del agua destinada a la reacción química del cemento. El cemento, privado de agua, no se hidrata correctamente, resultando en una mezcla que nunca alcanza su potencial de dureza y cohesión.

  • Solución: Siempre, sin excepción, regar el jal con abundante agua hasta que esté visiblemente húmedo y haya dejado de absorberla. De igual manera, humedecer la losa antes de verter la mezcla para evitar que esta también reste humedad a la capa de contacto.

Checklist de Control de Calidad para el Relleno

Para supervisores de obra, arquitectos o autoconstructores, tener una lista de verificación simple ayuda a garantizar que el trabajo se ejecute correctamente en cada etapa.

Revisión de la Calidad del Jal:

• Verificar visualmente que el material entregado esté limpio.

• Asegurarse de que no contenga una cantidad excesiva de tierra, basura, raíces u otros contaminantes.

• Comprobar que no tenga un exceso de finos o polvo, lo cual puede aumentar la demanda de agua de la mezcla.

Verificación de la Dosificación de la Mezcla.

• Confirmar que se estén utilizando recipientes de medición (botes) para dosificar el jal, la arena y el cemento.

• Supervisar la preparación de al menos una bachada para asegurar que el personal conoce y respeta las proporciones correctas.

• Chequear que el jal se humedezca adecuadamente antes de ser añadido a la mezcla.

Inspección de Niveles y Correcta Formación de Pendientes.

• Antes de iniciar el vertido, revisar que los hilos ("reventones") estén tensos y colocados a la altura correcta.

• Verificar que las maestras estén firmes y alineadas con los hilos.

• Durante la colocación, usar un nivel de mano sobre la regla para comprobar esporádicamente que se está manteniendo la pendiente.

Revisión de la Compactación y el Acabado Final antes del curado.

• Observar que el personal realice una compactación ligera y uniforme sobre toda la superficie.

• Inspeccionar el acabado regleado para asegurarse de que no haya "olas", depresiones o áreas porosas.

• La superficie debe quedar razonablemente plana y lista para recibir la siguiente capa (el entortado).

El Jal como Parte del Sistema Integral de Azotea

Es un error común pensar que el relleno de jal es la solución final para una azotea. En realidad, es solo una de las capas intermedias de un sistema constructivo complejo donde cada componente cumple una función específica e interdependiente.

El Siguiente Paso: El Entortado y el Firme de Acabado

El relleno de jal, por su naturaleza porosa y su mezcla pobre en cemento, no es una superficie de acabado. Es una capa de volumen y pendiente. Sobre este relleno se debe colocar una capa de mortero tradicional (cemento-arena en proporción aproximada de 1:5), conocida como entortado o firme de acabado. Esta capa, de unos 3 a 5 cm de espesor, proporciona una superficie dura, lisa, resistente al desgaste y con la pendiente final pulida, ideal para recibir el sistema de impermeabilización.

La Capa Final y Crítica: El Sistema de Impermeabilización

Ni el relleno de jal ni el entortado son impermeables. La protección contra filtraciones y goteras depende al 100% de la capa final: el sistema de impermeabilización. Este puede ser de diversos tipos (acrílico, asfáltico, prefabricado de rollo, poliuretano, etc.), pero debe ser aplicado sobre el entortado una vez que este ha curado y secado completamente. Aplicar un impermeabilizante sobre una superficie aún húmeda es una garantía de falla prematura del sistema.

Mantenimiento del Sistema Completo de Azotea

Una vez terminado, el sistema completo de azotea requiere un mantenimiento periódico para asegurar su longevidad. Esto incluye la limpieza regular de las bajadas pluviales para evitar obstrucciones, la inspección visual del sistema de impermeabilización para detectar posibles daños (grietas, ampollas) y la reaplicación de capas de protección o selladores según las recomendaciones del fabricante del impermeabilizante.

Preguntas Frecuentes (FAQ) sobre el Material Jal

¿Qué es exactamente la piedra de jal?

La piedra de jal es el nombre comercial que se le da en México a la piedra pómez, una roca de origen volcánico que se caracteriza por ser extremadamente ligera y porosa debido a los gases que quedaron atrapados en ella durante su rápido enfriamiento.

¿Cuánto pesa un metro cúbico de jal en comparación con la grava o el tezontle?

Un metro cúbico de jal seco pesa aproximadamente entre 700 y 900 kg. En comparación, un metro cúbico de tezontle pesa alrededor de 1,300 kg, y uno de grava común pesa cerca de 1,600 kg. El jal es notablemente más ligero que ambos.

¿Es necesario mojar el jal antes de usarlo en una mezcla?

Sí, es absolutamente indispensable. El jal es como una esponja seca; si se mezcla sin humedecer, absorberá toda el agua de la mezcla, impidiendo que el cemento se hidrate correctamente y dando como resultado un relleno débil que se desmorona.

¿El jal sirve como aislante térmico para una losa?

Sí, una de sus grandes ventajas es su capacidad de aislamiento térmico. Las miles de pequeñas burbujas de aire atrapadas en su estructura dificultan el paso del calor, ayudando a mantener los interiores de la edificación más frescos y reduciendo la necesidad de aire acondicionado.

¿Puedo usar jal para hacer una losa estructural?

No, categóricamente no. La mezcla ligera que se prepara con jal para rellenos tiene una resistencia a la compresión muy baja y no es estructural. Utilizarla para elementos que soportan carga, como losas, trabes o columnas, es extremadamente peligroso y podría provocar un colapso.

¿Cuál es el precio del material jal por m3?

El precio varía enormemente según la región de México. Como una estimación para 2025, en su zona de origen (Jalisco) puede costar entre $300 y $700 MXN por m³. En el centro del país puede subir a $650 - $1,100 MXN, y en el norte o sureste puede superar los $1,500 MXN debido al costo del flete.

¿Qué es mejor para rellenar una azotea, el jal o el tezontle?

La elección depende de tu ubicación. Técnicamente, el jal es superior por ser más ligero y mejor aislante. Sin embargo, si te encuentras en el centro de México, el tezontle será mucho más económico y cumplirá adecuadamente la función de relleno aligerado. La regla general es usar el material local.

¿Qué es el entortado de azotea?

El entortado es una capa de mortero de cemento y arena (más resistente que el relleno) que se aplica sobre el relleno de jal. Su función es crear una superficie final lisa, dura y con la pendiente adecuada, lista para recibir el impermeabilizante.

¿Cuánto cemento se necesita para un metro cúbico de relleno con jal?

Para una mezcla típica de relleno no estructural, se utilizan aproximadamente 2.5 bultos de cemento de 50 kg por cada metro cúbico de mezcla terminada.

¿El relleno de jal necesita compactarse?

Sí, pero solo de forma ligera. Se debe apisonar suavemente con una flota de madera para asentar el material, eliminar grandes huecos y asegurar una masa homogénea. No se debe compactar en exceso como si fuera un relleno estructural.

Videos Relacionados y Útiles

Para comprender mejor los procesos prácticos descritos en esta guía, los siguientes videos de YouTube son recursos visuales de gran valor que muestran a profesionales en acción.

Relleno en azoteas

Un video clásico que muestra el proceso de trazo de niveles y colocación de relleno de "concreto poma" (jal) usando maestras y regla.

Como hacer un entortado en losa de azotea.

Guía detallada sobre cómo preparar la losa, colocar malla, trazar niveles y aplicar un entortado para corregir pendientes y evitar encharcamientos.

RELLENO DE TEPOJAL SOBRE LOSA (PROYECTO NOCYTA)

Explica la función del relleno de tepojal (un término a veces usado para jal/tezontle) como aislante térmico y para alojar instalaciones.

Conclusión: La Solución Ligera y Eficiente para tus Azoteas

El jal se consolida como una solución de ingeniería excepcional para uno de los problemas más recurrentes en la construcción de azoteas en México: la necesidad de crear pendientes para el drenaje pluvial sin comprometer la estructura con peso excesivo. Su notable ligereza, combinada con el beneficio adicional de un excelente aislamiento térmico, lo convierte en un material versátil y altamente eficiente, especialmente en proyectos de remodelación o en zonas donde la reducción de la carga muerta es una prioridad. Si bien su elección frente a alternativas como el tezontle está fuertemente condicionada por la geografía y los costos de transporte, en las regiones donde abunda, es la opción técnica superior. Comprender el proceso de instalación, desde la preparación y dosificación hasta el curado, es clave para aprovechar al máximo sus propiedades. En última instancia, analizar el precio del material jal por m3 es un factor clave en la planificación y elección de rellenos para construcción, permitiendo a profesionales y autoconstructores tomar decisiones informadas para proteger y mejorar sus edificaciones.

Glosario de Términos de Agregados y Azoteas

• Jal: Agregado ligero de origen volcánico, sinónimo de piedra pómez. Es de color claro, muy poroso y de baja densidad. Abundante en el occidente de México.

• Tezontle: Agregado ligero de origen volcánico, tipo escoria. De color rojo o negro, es más denso que el jal. Abundante en la región central de México.

• Agregado Ligero: Material pétreo (natural o artificial) con un peso volumétrico significativamente menor al de la grava o arena común, utilizado para reducir el peso del concreto o morteros.

• Relleno Aligerado: Capa de material de baja densidad (como jal o tezontle) mezclado con un aglutinante (cemento), cuya función es dar volumen o pendiente sin añadir una carga estructural importante.

• Pendiente Pluvial: Inclinación mínima, generalmente del 2%, que se diseña en una azotea para asegurar que el agua de lluvia fluya por gravedad hacia los puntos de desagüe.

• Entortado: Capa final de mortero de cemento-arena que se aplica sobre un relleno aligerado. Proporciona una superficie lisa, dura y resistente, lista para ser impermeabilizada.

• Piedra Pómez: Término geológico para la roca volcánica vítrea y altamente vesicular que en la construcción mexicana se conoce comúnmente como jal.